domingo, 10 de enero de 2010

Objetivo de este blog

Geraldino Caminero Rodríguez

El objetivo fundamental de este espacio es orientar a la población humana sobre la necesidad imperiosa de preservar el único espacio del universo en dónde hasta la fecha podemos vivir los organismos bióticos, particularmente la especie humana. Somos los seres humanos quienes con nuestras actividades negativas estamos destruyendo los espacios vitales para el equilibrio de toda forma de vida en el planeta. La vida en la tierra es sustentada esencialmente porque existen organismos que como las plantas (árboles) que forman los bosques, las algas (localizadas en mares, ríos, lagos, lagunas y otros ambientes) y algunas algas. Estos organismos son los únicos en el planeta tierra que tienen la facultad de llevar a cabo el proceso de fotosíntesis, mediante el cual elaboran los alimentos que consumen todos los seres vivos, descomtaminan nuestro medio ambiente capturando anhídrico carbónico (CO2) y purifican el aire sumistrando oxígeno (O2) al ambiente. Este es el oxígeno que respiramos. Mientras más organismos que fotosinteticen existan en el mundo en que vivimos, más equilibrada será la vida en este espacio vital, donde únicamente podemos vivir.

Cual es la realidad actual? Que estamos deforestando a un ritmo anual de apróximadamente más de cuatro veces la extensión territorial de la República Dominicana, que es de 48,442 km2. Estamos hablando de cada año, unos 200,000 km2. Con una situación como la planteada, la calidad de vida en este espacio vital se reducirá cada vez más. Con una realidad como la planteada, no hay forma viable de que la vida, principalmente de los seres humanos, mejore en el planeta, tomando en consideración una población humana que crece de forma exponencial.

Un informe del Estado de la Población Mundial del Fondo de Poblaciones de las Naciones Unidas del 1998, reporta que la población humana en el año de 1950 era de 2,800 millones, 48 años después, en 1998, alcanzó los 5,900 millones y para el 2050 se espera una población de 9,400 millones. La preocupación de mayor trascendencia es el poder determinar la capacidad máxima de carga que puede soportar el planeta. Estos planteamientos difieren grandemente. Algunos entendidos en la materia consideran que el planeta soportará una carga máxima de 7,000 a 12,000 millones de seres humanos, en tanto que otros entienden que puede soportar de 20,000 a 48,000 millones en condiciones extremas para poder sobrevivir en lo que sería un hormiguero de seres humanos. Hace poco tiempo, en 1920, la República Dominicana tenía solamente 894,665 habitantes y en la actualidad somos posiblemente más de 10 millones de seres humanos.

Lo más lamentable es que pensamos que vivivos en lugar infinito, que no tiene límites y de esta manera estamos totalmente errado. La extensión del planeta en donde únicamente podemos vivir de de 509,8 millones de km2 y éstos más del 70% está ocupado por agua, en tanto en menos del 30% (unos 148.8 millones de km2) en lo que es tierra firme, es donde solamente podemos vivir. Estamos acorralados y no nos estamos dando cuenta. Si nuestras prácticas siguen siendo como las actuales, las catástrofes naturales y sociales, seguirán siendo irreversiblemente indetenibles. Seguiremos ampliando estos aspectos.





jueves, 7 de enero de 2010

Pereskia marcanoi

Esta es la flor masculina de la especie endémica, Pereskia marcanoi (Rosa de Bánica) captada por el lente de nuestra cámara en uno de los viajes de exploración al Cerro de San Francisco. Se puede observar una abeja posiblemente en busca de nectar para fabricar miel.



Estos son los frutos de la Rosa de Bánica y alrededor de ellos se encuentran las hojas, las cuales son exclusivas del género Pereskia, único en tener hojas verdaderas de la familia Cactaceae.

En substrato como el que estamos obserndo en esta fotografía es donde fundamentalmte se desarrolla la Rosa de Bánica. Pudimos comprobar, que en la vertiente Sur-Suroeste, fue encontrada la especie citada, posiblemente debido al tipo de substrato, muy rocoso y que los rayos del sol, por la exposición en la dirección señalada, calientan más. No encontramos la especie, en el lado Norte, posiblemente por el substrato menos rocoso y el sol calienta menos. Nos refereimos a la parte que está frente al Municipio de Pedro Santana.



Este es el Cerro de San Francisco visto desde el Municipio de Bánica, en una época de relativa sequía


Estos son estudiantes de la Licenciatura en Educación Mención Biología y Química del Centro Universitario Regional del Oeste (CURO) de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), de las asignaturas de Ecología General, Conservación de los Recursos Naturales y de Botánica, bajo la conducción y orientación del Profesor, Geraldino Caminero.


Desde arriba, las tres primeras fotos corresponden a la especie arbórea de nombre común, Rosa de Bánica y su nombre científico o técnico es Pereskia marcanoi Areces. Esta planta pertenece al único género de la familia Cactaceae que tiene hojas verdaderas y lo es Pereskia. Los cactus son plantas áfilas, es decir, no tienen hojas a excepción del género especificado. El nombre de la especie, marcanoi, fue dado en honor al Dr. Eugenio de Jesús Marcano, profesor de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), quien la descubrió en 1958. Es una especie endémica o autóctona, restringida en condiciones naturales al Cerro de San Francisco, localizado entre los Municipios de Bánica y Pedro Santana, ambos correspondientes a la provincia de Elías Piña. Esta provincia hace frontera con Haití. La Rosa de Bánica es dioica, lo que significa que hay individuos únicamente con flores femeninas e individuos con flores masculinas.

Durante nuestras funciones como Subdirector General del Jardín Botánico Nacional (JBN) llevamos a cabo labores de exploración e investigación, realizando un viaje por mes durante los primeros años de la década del 2000. Como consecuencia de lo especificado anteriormente, enumeramos algunos resultados de los trabajos realizados:

En un viaje que realizamos al Cerro de San Francisco el 15 de mayo de 1996, en compañía del Profesor Marcano (falleció), el Padre Julio Cicero, profesor e investigador del Instituto Politécnico Loyola de San Cristóbal y Tomás Montilla, Cartógrafo de la Secretaría de Estado de Agricultura, contamos 15 individuos de la Rosa de Bánica. Despues de nuestros viajes, inventariamos más de 100 individuos en el cerro. Otro aspecto sumamente importante fue, que devolvimos cientos de plántulas a la zona de orígen de la Pereskia marcanoi. Estas plántulas fueron germinadas en el JBN.




domingo, 3 de enero de 2010

Río Artibonito

El Río Artibonito es uno de los más caudalosos de la República Dominicana. Nace en la Cordillera Central y recorre parte de la frontera compartida con la República de Haití, donde sus aguas son muy utilizadas para diversos usos. En los momentos actuales sus riberas están muy deforestadas, en mayor porcentaje del lado haitiano. Observe del lado de Haití, un mercado muy informal donde se comercializan productos principalmente agropecuarios con pobladores de la República Dominicana, fundamentalmente de los municipios de Bánica y Pedro Santana, ambos pertenecientes a la provincia de Elías Piña, localizada al Oeste de nuestro país. El color de las aguas de este río nos hace inferir problemas muy severos en el orden ambiental, posiblemente de deforestación en la parte media y alta de la cuenca. Es preciso expresar, que Haití es el país más deforestado del hemisferio (95 a 96% de deforestación) y por tanto se hace sumamente necesario la recuperación de sus bosques como una forma viable para mejorar su calidad de vida.